En los temas de limpieza del hogar podemos tener muchas necesidades y no siempre hacerlo de la forma más eficiente posible. Esto es debido a que hay ocasiones en las que necesitamos ciertos trucos o productos específicos y si nunca nos hemos visto en esa situación es normal que nos sepamos cómo hacerlo. No es lo mismo saber cómo limpiar zapatillas blancas (que a fin de cuentas es algo que la mayoría de nosotros tenemos) que saber cómo limpiar el moho de la pared, porque quizá es algo que no te había ocurrido hasta ahora.
Limpiar el moho de la pared es muy importante para evitar tener en casa bacterias y microorganismos perjudiciales para la salud, pero también para evitar que prolifere más y siga apareciendo.
Trucos y productos para limpiar el moho de la pared
Una forma muy sencilla de eliminar es con agua y lejía. Es un desinfectante barato y que todos tenemos en casa, por lo que puedes ponerte manos a la obra en cualquier momento. Lo primero es crear la solución y para ello necesitarás un tapón de lejía y cuatro tapones de agua. ¡Ojo! Si lo que vas a limpiar son azulejos o la encimera de la cocina, mejor reduce la cantidad de lejía a medio tapón y sube a cinco tapones de agua. Si te sale poca cantidad en cualquiera de los dos casos, aumenta el volumen del líquido siempre de forma proporcional.
Una vez que lo hayas movido para que la lejía se diluya con el agua, empapa un estropajo o un paño y frota sobre la zona que tiene moho. Deja que actúe quince minutos y después limpia bien con un paño humedecido ahora solo con agua. Te puedes ayudar con un cepillo para quitar restos de moho, pero ten en cuenta que lo más importante es que la pared quede sin moho y sin lejía, bien limpita y seca, por lo que terminaremos con un paño seco que no arañe. La microfibra puede ser ideal para este propósito.
Esto puede hacer que se estropee la pintura de la pared, pero te aseguramos que es mejor esto a tener moho. La próxima vez que pintes invierte en pintura lavable para evitar que suceda esto.
