En Gizhogar siempre te recomendamos comprar un combi No Frost, ya que son bastante económicos y te ahorran tener que descongelar a mano el frigorífico y el congelador. Esto, aunque no es complicado, puede ser una tarea un tanto pesada y, seamos sinceros, ¿a quién le apetece hacer más tareas del hogar? Ya tenemos suficientes con las del día a día como para añadir otras adicionales.
Sin embargo, hay muchos casos en los que todavía no hay un combi No Frost en casa. Si te pasa a ti y te enfrentas a la tarea de descongelar a mano el frigorífico y el congelador, hoy te queremos contar cómo puedes hacerlo de la forma más sencilla posible.
Cómo descongelar a mano el frigorífico y el congelador de tu combi
Descongelar lleva un proceso y sobre todo una planificación. Tendrás que dejar tu combi con el mínimo de comida posible y, sobre todo, con el congelador totalmente vacío, ya que sabes que no es bueno descongelar y volver a congelar el mismo alimento. En el caso del frigorífico, suele aguantar más tiempo, pero igualmente es interesante que no tengas alimentos que se estropeen con facilidad.
Cuando ya estés listo, lo primero que tienes que hacer es apagar el combi. Mete en el frigorífico los alimentos que tengas y deja la puerta cerrada, vacía por completo el congelador y mantén la puerta abierta. Verás como la escarcha va poco a poco cayéndose y derritiéndose. Este proceso dura aproximadamenete hora y media, pero si quieres acelerarlo, puedes meter un bol con agua templada en el congelador (recuerda, abierto siempre) para que el calor haga que se derrita antes el hielo.
Una vez que lo tengas derretido, recoge el agua con una bayeta. Ahora, con una esponjita con Fairy, aprovecha para limpiar bien el interior, aclara con una bayeta y seca con una microfibra.
A continuación, vamos con el frigorífico. Saca toda la comida y quita estantes y cajones. Cuando lo tengas totalmente vacío, repite el mismo proceso: esponjita con Fairy, bayeta y microfibra. Es importante que esté totalmente seco. Ahora, vuelve a encenderlo y ciérralo. Mientras tanto, ve limpiando estante por estante y cajón por cajón con el mismo procedimiento y, cuando lo tengas, ve metiéndolos de uno en uno en el frigo y aprovechando para ir metiendo comida. Primero, la más delicada. Luego ya lo colocarás bien cuando tengas todos los estantes en su sitio.
¡Listo!
Si te preguntas cada cuánto hay que descongelar, te lo contamos en el artículo que te acabamos de enlazar.
